Buscamos reestablecer los derechos vulnerados de las niñas, niños y jóvenes afectados por distintas crisis humanitarias y procesos migratorios masivos. En momentos de adaptación, intentamos generar espacios de inclusión en comunidades, albergues y escuelas a través de las sesiones sociodeportivas. En ese contexto, los festivales comunitarios ayudan a generar inclusión en el espacio público y promueve el intercambio de culturas y tradiciones de cada etnia. Por otra parte, se trabaja con la formación de tutores, para que se transformen en embajadores del programa dentro de las mismas comunidades, promoviendo una cultura de cuidado y de respeto en niños, niñas, jóvenes y sus familias.